November 29, 2011

El destino en mi espalda.


Cuando estoy sola el día y la noche se confunden, en un mareo con nauseas de ayer, en un subir y bajar escaleras zigzagueante, en un loop enfermizo.
Cuando estoy sola la ausencia se hace presente, la muerte me habla y la entiendo, se convierte en confidente y amiga, cuenta las horas de esclavitud en la tierra, mientras su hermano menor sopla arena en su cara y fabrica sueños para ella.
Cuando estoy sola la muerte me habla, y el destino mira, desde lejos, con su capucha baja y aferrado a su libro.
Destino silencioso y muerte llena de palabras.
Ellos cuidan mi espalda.
Yo les recuerdo a casa. Soy su personificación, su prueba de vida.
Su karma.

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